Mostrando las entradas con la etiqueta Narrativa. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Narrativa. Mostrar todas las entradas

miércoles, 24 de abril de 2024

La chispa de Francisco de Quevedo

Es legendaria la agudeza de ingenio de Francisco de Quevedo. Hoy les comparto tres  divertidas anécdotas del gran escritor. (Tomado de Historias de la literatura)

📚

Un día un aprendiz insistió en leerle un par de sonetos que había escrito.

Tras leer el primero, Quevedo le dijo:

—El siguiente será mejor.

A lo que el aprendiz replicó:

—¿Cómo podeis saberlo, si aún no lo he leído?

Y Quevedo respondió:

—Sencillamente, amigo mío, porque es imposible que sea peor que el que acabo de escuchar.

📚📚

Un día paseaba Quevedo por las galerías del Real Alcázar, cuando un grupo de cortesanos que estaban allí le reconocieron, y, sabiendo de su habilidad para improvisar versos, uno le dijo:

—¡Quevedo, hacednos un verso!

El escritor le contestó:

—Dadme pie.

Quevedo pretendía una palabra o una idea, pero el cortesano lo interpretó literalmente y le acercó su pie.

El autor, sujetando el pie, improvisó:

—Paréceme, gran señor,

que estando en esta postura,

yo parezco el herrador

y vos la cabalgadura.

📚📚📚

Estando enfermo Quevedo durante su cautiverio en el Convento Real de San Marcos, en León, uno de los religiosos que lo cuidaban, le trajo un caldo que más que caldo era agua caliente.

El poeta empezó a decir:

—¡Bravo caldo, valiente caldo!

Ante la pregunta del religioso de porqué era valiente el caldo, Quevedo respondió:

—Porque no tiene nada de gallina.


_______________

Francisco Gómez de Quevedo Villegas y Santibáñez Cevallos 
(1580- 1645) fue un noble, político y escritor español del Siglo de Oro. Fue caballero de la Orden de Santiago a partir de 1618​ y señor de Torre de Juan Abad a partir de 1620. Junto con Luis de Góngora, con quien mantuvo una enemistad durante toda su vida, es reconocido como uno de los más notables poetas de la literatura española. Además de su poesía, fue un prolífico escritor de narrativa y teatro, así como de textos filosóficos y humanísticos.

jueves, 18 de abril de 2024

Decálogo literario Zadie Smith

 Decálogo de Zadie Smith

Tomada de El Tiempo.

I

Mientras seas pequeño, asegúrate de leer muchos libros. Dedica más tiempo a la lectura que a cualquier otra actividad.


II

De adulto, intenta leer tu propio trabajo como lo leería un extraño. O mejor aún, como lo leería un enemigo.


III

No rodees de romanticismo tu «vocación». O eres capaz de escribir buenas frases, o no. No existe eso del «estilo de vida del escritor», lo único que importa es lo que dejas en la página.


IV

Evita tus debilidades. Pero hazlo sin decirte a ti mismo que las cosas que no puedes hacer no valen la pena. No disfraces tu falta de confianza en ti mismo de desprecio.


V

Deja que pase un tiempo aceptable entre el proceso de escritura y el de edición.


VI

Evita las camarillas, las pandillas y los grupos. La presencia de la manada no hará que mejores como escritor.


VII

Trabaja en un ordenador que no tenga conexión a Internet.


VIII

Protege el tiempo y el espacio que dedicas a escribir. Mantén a todo el mundo lejos de tu espacio de trabajo, incluso a aquellas personas que son más importantes para ti.


IX

No confundas premios con logros.


X

Di la verdad. A través de cualquier forma en la que se te revele, pero dila. Resígnate a la eterna tristeza que proviene de nunca quedar satisfecho.

___________


Zadie Adeline Smith, de nacimiento Sadie Adeline Smith, (Londres, 25 de octubre de 1975)1 es una escritora, novelista, ensayista, y escritora de relatos cortos británica.​ 

Su primera novela, Dientes blancos se convirtió inmediatamente en un best-seller y ganó varios premios. Es profesora titular de la Facultad de Escritura Creativa de la Universidad de Nueva York desde septiembre de 2010.

miércoles, 6 de marzo de 2024

Lanzamiento del libro 18 fotos.

El próximo 18 de marzo de 2024 tendrá lugar el lanzamiento del libro 18 FOTOS de la escritora Angela María Ramírez Gil. El evento será en la sala Mi Barrio del Parque Biblioteca de Belén. 


18 Fotos cuenta la historia de una mujer que ha tenido una relación distante con su padre, y recibe al morir este, una cámara fotografica de las antiguas, en la que descubre un rollo aún sin revelar.  Desconoce que fotografías fueron tomadas por su padre. También descubre que aun quedan 18 fotos por tomar.  Una idea fascinante para una novela.  

A continuación, con el permiso de la autora trascribo algunos apartes. 

Miro el celular. Ocho y dos. Salgo. La gente se ha multiplicado. El sol está tímido aún; debe ser por el cemento que me rodea. Las columnas del metro disimulan el exceso de luz en esta época. Hay un afán en el aire. En los seis metros que camino para llegar al local de las fotos, me zarandean dos veces, chocan con mis hombros y, como si el viento se llevara las palabras, un «disculpe» se arrastra hasta mis oídos.

—¿También revelan estos rollos? —pregunto de inmediato cuando entro al local.

Eso debí habérmelo cuestionado antes de crear todas estas expectativas, de fantasear con lo que mi papá tenía ahí, con lo que había visto, con lo que había grabado para mí, o tal vez no eran para mí las fotos y tan solo no las reveló porque lo ligaban a todo el pasado con mi mamá.

La mujer, vestida con delantal blanco, de cabello rubio con raíces oscuras y grumos de pestañina, exagerados para la hora y el trabajo, me dice que claro que me lo pueden revelar y que también aplica la promoción. Estira la mano y yo me aferro a los secretos —creo que lo son—.

—Pero es que tiene por ahí, no sé, ¿quince años? —le digo agarrando la Minolta.

—¿La cámara?

—El rollo. La cámara tiene muchos más. ¿Sí saldrá algo?

—¡Juan! —grita la mujer, y detrás de una cortina amarilla y negra, a juego con todo el local, aparece un hombre calvo y bajito, tiene una figura cuadrada. —Mirá, que esto tiene un rollo de quince años.

—O más —interrumpo.

—O más —repite ella.

El tipo nos mira como si fuéramos pelotas de pimpón y sonríe, alza las manos y dice que saldrán claras, pero saldrán, eso sí, si están bien tomadas.

—¿Es una réflex? —Se acerca, mira la cámara y la revisa—. Te quedan seis o dieciocho por tomar, depende del rollo.

—Dieciocho —respondo.

Estoy segura: las películas de treinta y seis salían más económicas. Era propio de mi papá.

 ________________________

«Es un karma, un karma», me repetí. La muerte iba alcanzándome, y yo me rendía como si fuera una flor bajo un aguacero. Tomé la Minolta, la metí en una caja abajo del clóset donde pongo los zapatos y seguí con mi vida tan serena como pude. Y lo logré. Me acostumbré a los días tranquilos, a los momentos perfectos, esos en los que, sin necesidad de tener una persona al lado o una comida exquisita, yo estaba bien, feliz con mis carencias, en mi cama demasiado dura, en mi cuarto pequeño. Estaba tan conforme que los imbéciles del lunes me hicieron doler la cabeza, cuando en el tranvía empezaron a hablar de por qué uno de ellos no quería seguir con su novia.

«Es que es tan plana, parce». Me miré el pecho, fue un reflejo de la crianza machista que tuve. Me reí, pero luego el tipo aclaró su frase, y la risa se me disolvió: «Tiene una vida tan aburrida y plana que ya no puedo seguir con ella».

Yo, en todos los sentidos, soy una mujer plana. En la mañana llego siempre temprano. Las tres cuadras que tengo que caminar, de la estación al trabajo, me las paso en zigzag para no leer lo que entiendo mal, para evitar pasar por el edificio del que mi papá saltó porque mi trabajo queda ahí abajito. Creo que, por eso, al ver el letrero de revelado e impresión de fotos al 50 %, este me llamó la atención. Estoy cansada de tirarle blusas y trapos a la caja con la cámara cada que abro el clóset. Hay algo que me impide taparla del todo, y sin embargo no quiero verla. Por eso decidí revelar el rollo.

 ___________________________ 

 Agarro mi cámara. Luisa me dice que parezco una turista en Cartagena. Me quito la toca, me suelto el cabello y salgo al sol de las tres de la tarde que pega duro.

Bajo por todo Ayacucho. Me voy buscando la sombra, pero lo único que aplaca la luz amarilla es el tranvía. En el semáforo de la 35 paro. Está en verde. Miro a todos lados a ver si paso, pero un taxi aprovecha y mete pique antes de que cambie. Algo en el semáforo está mal, pero no soy capaz de reconocerlo hasta que me fijo bien. Capas y capas de cinta de embalaje sostienen el tablero de luces. Me río y le saco una foto. Los remiendos funcionan. Es posible que yo use algo así para arreglarme, para amarrar esas piezas flojas, esas que se me han ido quedando regadas con los años y las experiencias. Esas grietas que tengo las puedo sellar y tal vez funcionarían bien como el semáforo, como todo el mundo en una u otra etapa de su vida. La idea con la foto es acabar el rollo.

 

 Los esperamos este lunes 18 de marzo para las 18 fotos. (Entrada Libre)

 

Otras publicaciones de Ángela María Ramírez

  • Isolda/ Novela juvenil
  • Hojas amarillas/ Libro de poesía
  • La corredora/ Novela Juvenil
  • Toc, toc. ¿quién soy? / Libro de cuentos
  • La Campanella/ cuento/ Veinte y una narradoras, palabras rodantes
  • Escalas del sexto/ cuento Líneas cruzadas editorial Hilo de plata

Redes:

Instagram: AMR.escritoras
AMR.escritoras@gmail.com
WhatsApp 3122377247


miércoles, 21 de febrero de 2024

De las babas al papel: Entrevista con Memo Anjel.

Quizas muchos conozcan a Memo por su programa radial "La otra historia" transmitido por Radio Bolivariana.  Otros lo conocen porque ha sido su profesor, y muchos otros por sus libros. 

Tengo el gusto de conocerlo y me siento honrado por su amistad. Un amigo de los que uno se siente orgulloso de tener. 

Esta semana comparto la entrevista que hace Pao Restrepo (La monita) al escritor antioqueño de raices sefaradíes. 




miércoles, 7 de febrero de 2024

Entrevista a la escritora y artista Male Correa

Conocí a Male Correa hace algunos años, cuando fuimos invitados al municipio de Donmatias para un evento que se llamó "Derroche de cuentos". Ella acudía con el grupo del Taller Literario del profesor Luis Fernando Macías.  

Desde entonces quedé enamorado de su prosa y de su creatividad.  Posteriormente conocí varios de sus trabajos. (ver No es tan gallina porque adivina). 

Hace poco lanzó un bello libro "Dosconocidos" que trata de su reencuentro con su padre. Un bellísimo libro que recomiendo plenamente. (Editorial Otrabalsa)

A continuación comparto la entrevista de "la monita" (Pao Restrepo) a la artista. 


Les dejo el enlace para que conozcan tanto su obra plástica como sus textos Male Correa. 

miércoles, 31 de enero de 2024

Entrevista a Emperatriz Muñoz (escritora).

Emperatriz Muñoz Perez  es una de las mejores escritoras antioqueñas. 

Ha publicado las novelas La casa en el barrio (Editorial Universidad de Antioquia, 2013) y El asunto, y el libro de cuentos A Dios le dio Alzheimer y otros cuentos. Algunos de sus relatos han sido publicados en las revistas Generación de El Colombiano; Odradek, el Cuento; Puesto de Combate y Ficción, la Revista, y en los libros Trabajos de taller: Taller de creación literaria Universidad de Antioquia, Memorias del XII encuentro de poetas de la zona noroccidental de Medellín y Antología de cuentos: Talleres literarios 2010, Red Nacional de Talleres de Escritura Creativa. Durante varios años perteneció al Taller de Creación Literaria de la Universidad de Antioquia. 

A continuación les compartimos la entrevista que le hizo Pao Restrepo ("la monita") a esta excelente escritora. 




miércoles, 24 de enero de 2024

Entrevista a Reinaldo Spitaletta

Reinaldo Spitaletta es un escritor antioqueño muy conocido en los medios de comunicacion. Periodista, columnista en varios periódicos de la ciudad, director del programa "Medellin Anverso y Reverso" de Radio Bolivariana.  Esun caminador incansable, amante de la historia y un excelente fotógrafo que comparte en sus redes sociales su visión de ciudad.   

A continuación compartimos una amena entrevista que le hizo Pao Restrepo "La monita" .  Espero la disfruten. 

miércoles, 17 de enero de 2024

Las bambalinas del escritor. Abelardo Castillo

 Las bambalinas del escritor

Por Abelardo Castillo

No hay escritor que en los días inmodestos de sus primeros versos no imagine la edición de sus obras completas, vasta colección en papel biblia que lo salvará de la muerte y el olvido. También  suele prever su biografía, poblada de mujeres, escándalos, críticos estúpidos y anécdotas wildeanas. Uno tiene veinte años y no lo desanima el hecho de que, para que sucedan estas cosas, deba todavía vivir, escribir, y sobre todo morirse. Cuando se llega a mi edad, ciertas fantasías empiezan a materializarse, pero resultan muy inferiores a su original platónico.

Un autor que ha publicado tres novelas, algunas obras de teatro, unos cincuenta cuentos, un  centenar de notas y pequeños ensayos, debería poder referirse a su oficio sin parecer apresurado  o megalómano, pero exactamente en este punto empieza mi problema: hoy tengo tan pocas certezas sobre la literatura como cuando era adolescente. No sé nada acerca de qué es, ni por qué se hace, ni cómo se hace un poema, una novela o una obra de teatro. Cuando quiero impresionarme a mí mismo, simulo poseer una teoría sobre el cuento. Es la misma que inventó Poe, que repitieron Quiroga y Maupassant, que puso en práctica Chéjov. Una especie de decálogo personal, que puede enunciarse así:

– Si usted imagina que doscientas páginas son un trabajo literario más serio que diez, nunca escribirá un buen cuento, ni siquiera uno malo, quizá tampoco una novela.

– Si empieza a escribir sin saber adónde va, tal vez tenga suerte y consiga vender eso como literatura de vanguardia; si sabe adónde va, el día menos pensado escribirá un cuento.

– Si ve que un señor se cae en la calle y se pregunta qué hará cuando se levante, puede que usted sea novelista o incluso filósofo; un cuentista sólo piensa: ¿por qué se cayó?

– Si cree que el célebre texto de Monterroso sobre el dinosaurio es un cuento, usted debe leer la crítica a Nathaniel Hawthorne, de Poe, o, en su defecto, la Filosofía de la composición, en lo referido a la brevedad indebida; y si en vez de dinosaurio su memoria se empecina en leer:  “Cuando se despertó, el unicornio todavía estaba allí”, usted habrá mejorado mucho la imagen de  Monterroso y, aunque nunca escriba un cuento, tal vez tenga condiciones para el haikú.

– Si tiene tendencia a escribir cristal, en vez de vidrio; rostro, en vez de cara; ascender, en vez de subir; o utiliza ex presiones como ¡bingo!, pantaletas, carrusel, dése una vueltita por el mundo real.

– Una palabra innecesaria puede estropear un buen cuento; una página innecesaria estropea a un buen lector.

– Si un cuento ajeno le gusta mucho, escríbalo otra vez usted mismo: existen ejemplos ilustres.

Si, por último, ha reparado en que el anterior decálogo sólo tiene ocho o nueve preceptos, dedíquese con entusiasmo a la crítica literaria.


_______________


Ser escritor recoge escritos breves del argentino Abelardo Castillo (1935-2017), dramaturgo, cuentista notable, formador de escritores en talleres literarios. El libro, editado por Seix Barral,  incluye perfiles de escritores, consejos, memoria sobre el oficio, anécdotas, críticas.

miércoles, 18 de octubre de 2023

El ambiente, en la literatura de terror

¿Qué características definen a la literatura de terror?

El profesor Gustavo Adolfo Bedoya nos cuenta un poco sobre uno de los aspectos principales de un cuento o una novela de terror.  

_____________


Gustavo Adolfo Bedoya Sánchez:  


Profesor universitario e investigador.  Licenciado en literatura de la Universidad del Valle, con maestría en literatura colombiana de la Universidad de Antioquia y doctorado en historia de la Universidad Nacional. 

En el 2022 fue finalista del XVIII Certamen de Relatos “Pilar Baigorri” (España), segundo lugar en el “II Concurso Nacional de Cuento: Dagua Escribe” (Colombia), mención especial en el I Concurso Nacional de Cuento “Santiago Martínez Camacho” (Ecuador); y en el 2020 fue finalista de la VII Edición del Concurso “Cuentos cortos para esperas largas” (Colombia). Asimismo, es el autor del blog de reseñas:  https://guardopalabras.blogspot.com/


Quienes estén interesados en tomar alguno de sus cursos les dejamos la información abajo.


Literatura y Terror. 
Sábados: 10:00 a 12:00 m.

Ciencia Ficción Distópica. 
Sábados: 2:00 a 4:00 p.m.

Lugar: Librería Grámmata 
(Sede Estadio) Medellín
Inscripciones: 301 426 69 18

Los asistentes NO necesitan ningún conocimiento previo.

miércoles, 27 de septiembre de 2023

Tres escritoras antioqueñas.

Una excelente entrevista con escritoras jóvenes y muy talentosas. Angela Ramírez, Sonia Emilse García y Silvia Montoya conversan con Yuly María Sanchez y Aldair Ballestas en el programa La voz del tintero, del canal Telemedellin- Radio volpaleson. 





Ver más.  

Angela María Ramírez M

La Corredora: Angela Ramírez

Hojas amarillas

Isolda

Toc, toc, ¿quién soy?


Sonia Emilce García Sanchez. 

El lápiz labial de mamá

Corazón Valiente

miércoles, 23 de agosto de 2023

El escritor Luis Fernando Macías en la voz del tintero

Esta semana compartimos una entrevista de que le hicieron al profesor Luis Fernando Macías en el programa La voz del tintero, de Telemedellín.  En esta amena conversación con Yuly Sanchez y Aldair Ballestas nos cuenta un poco de su proceso como escritor y profesor. Una entrevista imperdible para aquellos que aman la literatura. 



_________________




Luis Fernando Macías Zuluaga (Medellín, 1957) es narrador, poeta, ensayista, editor y autor de obras para niños, licenciado en Educación, Español y Literatura, especialista en Literatura Latinoamericana y magíster en Estética y Filosofía del Arte. Ha sido director de la «Revista Universidad de Antioquia», institución donde ejerce como profesor, y codirector de las revistas «Poesía» y «Esteros». Entre sus libros se destacan las novelas «Amada está lavando», «Ganzúa», «Eugenia en la sombra», «Las muertes de Jung», «Morir juntos»; las obras de poesía «La línea del tiempo», «El jardín del origen», «El libro de las paradojas», «Memoria del pez» (compilación 1977-2017), «Todas las palabras reunidas consiguen el silencio» (antología bilingüe); y los ensayos y compilaciones «Diario de lectura I: Manuel Mejía Vallejo», «Diario de lectura II: el pensamiento estético en las obras de Fernando González», «Diario de lectura III: León de Greiff, quintaesencia de la poesía», «Diario de lectura IV: Libro de los viajes o de las presencias», «El juego como método para la enseñanza de la literatura a niños y jóvenes»; «Glosario de referencias léxicas y culturales en la obra de León de Greiff», «El taller de creación literaria, métodos, ejercicios y lecturas» y «La expresión poética».

miércoles, 16 de agosto de 2023

Visita de Piedad Bonnett al Taller de historias.

El 14 de agosto el Taller de Historias tuvo una visita muy especial. La escritora colombiana Piedad Bonnett estuvo con nosotros y nos habló de su vida, de su obra, de sus técnicas para la creación literaria y nos dio algunos consejos muy valiosos. 




Gracias infinitas. 


miércoles, 9 de agosto de 2023

Entrevista a un grande de la literatura local

Siempre es un gusto escuchar a alguien que sabe de un tema que nos gusta.  En esta semana continuamos con otra entrevista hecha al escritor Luis Fernando Macías. En esta ocasión habla con Yuly María Sanchez y Aldair Ballestas, del programa La Voz del tintero. Esperamos les guste. 



_________________




Luis Fernando Macías Zuluaga (Medellín, 1957) es narrador, poeta, ensayista, editor y autor de obras para niños, licenciado en Educación, Español y Literatura, especialista en Literatura Latinoamericana y magíster en Estética y Filosofía del Arte. Ha sido director de la «Revista Universidad de Antioquia», institución donde ejerce como profesor, y codirector de las revistas «Poesía» y «Esteros». Entre sus libros se destacan las novelas «Amada está lavando», «Ganzúa», «Eugenia en la sombra», «Las muertes de Jung», «Morir juntos»; las obras de poesía «La línea del tiempo», «El jardín del origen», «El libro de las paradojas», «Memoria del pez» (compilación 1977-2017), «Todas las palabras reunidas consiguen el silencio» (antología bilingüe); y los ensayos y compilaciones «Diario de lectura I: Manuel Mejía Vallejo», «Diario de lectura II: el pensamiento estético en las obras de Fernando González», «Diario de lectura III: León de Greiff, quintaesencia de la poesía», «Diario de lectura IV: Libro de los viajes o de las presencias», «El juego como método para la enseñanza de la literatura a niños y jóvenes»; «Glosario de referencias léxicas y culturales en la obra de León de Greiff», «El taller de creación literaria, métodos, ejercicios y lecturas» y «La expresión poética».

miércoles, 26 de julio de 2023

Literatura, ciencia ficción y viajes en el tiempo: La voz del tintero

Esta semana continuamos con una serie de programas sobre literatura del programa La Voz del Tintero. En esta ocasión en una entrevista sobre los viajes en el tiempo, del libro "Matar al lobo".






Mis agradecimientos a Yuly Sanchez, al profesor Gustavo Bedoya, a Aldair Ballestas, y por supuesto a Felipe, del control master.



miércoles, 19 de julio de 2023

Lina Marcela Cardona En La Voz del tintero.

Continuamos esta semana con una entrevista que le hicieron a la escritora Lina Marcela Cardona García, ganadora del premio de Medellín en 100 palabras durante el 2022 con su cuento "La prótesis" y autora del libro Brevemar. 


Haz clic acá para leer su cuento "La Prótesis" 

Haz clic para leer un fragmento de Brevemar.
  

_____________


Lina Marcela Cardona García. 
Medellin, 1978. 

Contadora pública de la Universidad de Antioquia, con
especialización en Alta Gerencia de la Universidad de Medellín. Cursó la maestría en Hermenéutica literaria (2016) y el diplomado en edicion de textos (2020) en la Universidad EAFIT.  Actualmente se desempeña como líder de riesgos y controles en una multinacional.  Ha participado en talleres de escritura creativa y cursos literarios como la Escuela de Escritores de Madrid, (2020), Asmedas (desde 2019) con el escritor Luis Fernando Macías, y "Viajeros" con el escritor Pablo Montoya (2021). Hizo parte de la investigación histórica "100 empresarios, 100 historias de vida: Francisco Luis Jiménez" de la Cámara de Comercio de Medellin.   
Brevemar es su primer libro de relatos y crónicas.  Fue ganadora del premio de microrelatos Medellín en 100 palabras en el 2022 con su cuento "La prótesis", en el que hace un sentido homenaje a su padre, quien falleció en la pandemia. 

Lina Marcela Cardona con el profesor 
Luis Fernando Macías,  autor del prólogo


Brevemar,  proyecto ganador en la sexta convocatoria de Fomento y Estímulos para el Arte y la cultura 2021, de la Secretaría de Cultura de Medellín.  

Editorial Otrabalsa - Crónica
ISBN 978-958-49-4445-0
Prólogo de Luis Fernando Macías
Ilustraciones Interiores:  Male Correa. 

miércoles, 12 de julio de 2023

El miedo, el terror y el horror en literatura: Profesor Gustavo Bedoya (segunda parte)

Continuamos con la segunda entrevista   al profesor Gustavo Adolfo Bedoya Sánchez que hizo el programa La voz del Tintero, del canal TeleMedellín. (vea la primera entrevista acá)



  

_____________


Gustavo Adolfo Bedoya Sánchez:  


Profesor universitario e investigador.  Licenciado en literatura de la Universidad del Valle, con maestría en literatura colombiana de la Universidad de Antioquia y doctorado en historia de la Universidad Nacional. 

En el 2022 fue finalista del XVIII Certamen de Relatos “Pilar Baigorri” (España), segundo lugar en el “II Concurso Nacional de Cuento: Dagua Escribe” (Colombia), mención especial en el I Concurso Nacional de Cuento “Santiago Martínez Camacho” (Ecuador); y en el 2020 fue finalista de la VII Edición del Concurso “Cuentos cortos para esperas largas” (Colombia). Asimismo, es el autor del blog de reseñas:  https://guardopalabras.blogspot.com/


Quienes estén interesados en tomar alguno de sus cursos les dejamos la información abajo.


Literatura y Terror. 
Sábados: 10:00 a 12:00 m.

Ciencia Ficción Distópica. 
Sábados: 2:00 a 4:00 p.m.

Lugar: Librería Grámmata 
(Sede Estadio) Medellín
Inscripciones: 301 426 69 18

Los asistentes NO necesitan ningún conocimiento previo.

miércoles, 5 de julio de 2023

Seis reglas para escribir. George Orwell

Esta semana tenemos un tema corto. Les traemos seis reglas de George Orwell para escribir:

  1. Nunca uses una metáfora, símil u otra frase hecha que estés acostumbrado a ver por escrito.
  2. Nunca uses una palabra larga si puedes usar una corta que signifique lo mismo.
  3. Si es posible eliminar una palabra, hazlo siempre.
  4. Nunca uses la voz pasiva cuando puedas usar la activa
  5. Nunca uses una expresión extranjera, una palabra científica o un término de jerga si puedes pensar en una palabra equivalente en tu idioma que sea de uso común.
  6. Incumple cualquier regla antes de escribir nada estúpido.




Eric Arthur Blair, (1903, India - 1950 Reino Unido) ​ conocido por su seudónimo de George Orwell, fue un novelista, periodista, ensayista y crítico británico nacido en la India, autor entre otras obras de las novelas distópicas Rebelión en la granja y 1984.

miércoles, 28 de junio de 2023

Gustavo Bedoya y la Voz del Tintero

Esta semana les compartimos una entrevista al profesor Gustavo Adolfo Bedoya Sánchez que hizo el programa La voz del Tintero, del canal TeleMedellín. Una excelente charla donde nos explica qué es la literatura de terror y de horror, en que consiste el mal denominado género de ciencia ficción y otros aspectos más que sabemos que les serán muy interesantes. 


   

_____________


Gustavo Adolfo Bedoya Sánchez:  


Profesor universitario e investigador.  Licenciado en literatura de la Universidad del Valle, con maestría en literatura colombiana de la Universidad de Antioquia y doctorado en historia de la Universidad Nacional. 

En el 2022 fue finalista del XVIII Certamen de Relatos “Pilar Baigorri” (España), segundo lugar en el “II Concurso Nacional de Cuento: Dagua Escribe” (Colombia), mención especial en el I Concurso Nacional de Cuento “Santiago Martínez Camacho” (Ecuador); y en el 2020 fue finalista de la VII Edición del Concurso “Cuentos cortos para esperas largas” (Colombia). Asimismo, es el autor del blog de reseñas:  https://guardopalabras.blogspot.com/


Quienes estén interesados en tomar alguno de sus cursos les dejamos la información abajo.


Literatura y Terror. 
Sábados: 10:00 a 12:00 m.

Ciencia Ficción Distópica. 
Sábados: 2:00 a 4:00 p.m.

Lugar: Librería Grámmata 
(Sede Estadio) Medellín
Inscripciones: 301 426 69 18

Los asistentes NO necesitan ningún conocimiento previo.






miércoles, 22 de marzo de 2023

Cuando Hitler robó el conejo rosa. Reseña.

Con el permiso del profesor Gustavo Adolfo Bedoya, les transcribo el post de su blog Guardopalabras


Apuntes sobre Cuando Hitler robó el conejo rosa (1972) de Judith Kerr

Juan Manuel está a punto de graduarse y ya consiguió un empleo como profesor. “Voy a ser profesor”, me dijo. De seguro que se siente muy feliz, ¿y quién no? Con tantas dificultades tener un empleo, ¡cualquier empleo!, parece un milagro digno de celebrarse y agradecerse. Así van las cosas en este mundo…

Hace algunas semanas Juan Manuel me escribió pidiéndome un listado de obras literarias para leer con sus estudiantes. Cada vez que esto ocurre, cada vez que alguien como él confía en mi criterio, me siento orgulloso, tanto que –por ejemplo–, no dudo en contárselo a mis allegados.

Ese mismo día le respondí. Le dije que antes de pensar en un listado ideal debía revisar las existencias reales de la biblioteca del colegio y la biblioteca pública más cercana. Le dije que no obviara, por ningún motivo, los gustos y las expectativas de sus estudiantes, y que recordara que nuestra meta es formarlos como lectores críticos de cualquier tipo de texto, y no solo de los literarios. Al final me atreví a decirle que el cambio más importante en la educación NO es el tecnológico, tal como muchos creen ahora. El mayor cambio es pedagógico y didáctico, un cambio que también tiene que diferenciar a la evaluación de la calificación… Cerré mi respuesta diciéndole que no dudara en volver a escribirme, si lo creía necesario.

Espero que Juan Manuel tenga un inicio laboral inolvidable. El mejor de todos los inicios posibles. Espero que su alegría no desaparezca cuando la realidad se le presente ¡tan distinta! a la teoría.

Luego de enviarle mi respuesta me quedé pensando en los títulos de algunas obras literarias que no dudaría en leer con los estudiantes de cualquier escuela y colegio. Obviamente, en el caso hipotético en que bastara con mencionar el título para que –de alguna manera–, éstos aparecieran por arte de magia en las bibliotecas públicas y en las también hipotéticas bibliotecas de los estudiantes. Pensé, especialmente, en algunas novelas, a saber, en: Momo (1973) de Michael Ende; Las brujas (1983), de Roald DahlEl libro salvaje (2008), de Juan Villoro y en Cuando Hitler robó el conejo rosa (1972), de Judith Kerr; título que a continuación me permitiré comentar.

Cuando Hitler robó el conejo rosa (1972) es una novela que narra la manera en que su protagonista, una niña de nueve años, se enfrenta a la realidad de la Alemania nazi. En su historia, la protagonista advertirá el poder omnipresente de la propaganda, así como conocerá el daño que hacen las noticias falsas y sufrirá el miedo, la angustia y la desazón ante las próximas elecciones. La ciudad está invadida por la reproducción del rostro de aquel hombre que tanto daño le hará a ella y a su familia y que, desde su punto de vista, le ha robado su conejo rosa. En pocas palabras: esta es una novela que narra la manera en que el mundo adulto obliga a los niños a crecer, de la noche a la mañana; una novela en la que la realidad se traga entera los sueños.

Sé que mi lectura no puede agotar las interpretaciones de la novela. Sé que ella significa otras tantas cosas a sus otros lectores; sin embargo, quiero hacer énfasis sobre algunos aspectos de la obra que siempre han llamado mi atención:

Construir al enemigo: esta novela deja entrever la manera en que se construye al enemigo. Para ello se utiliza la propaganda y las noticias falsas, pero también el miedo y el odio. Miedo y odio que pueden ser enseñados y aprendidos. Los niños pueden aprenderlos de cualquier adulto. Así, en la novela, los otros, los enemigos, son vistos como “tacaños”, “groseros” y “holgazanes”, además de “sucios”. Cuidado: si los diferenciamos de nosotros mismos no habrá poder que impida que los ataquemos; lo llamaremos: defensa.

Un nuevo glosario: es clara la importancia del lenguaje para crear al enemigo, pero el lenguaje también permite en la novela enunciar a la nueva realidad: palabras y expresiones tales como “confiscación de la propiedad” y “depresión económica”, pero también, palabras como “refugiado” y “segregación”, y las expresiones “ponerle precio a la cabeza de alguien” o “campo de concentración”, entre muchas, muchas otras.

Demasiada realidad: el nuevo glosario, el glosario de la realidad, hará que los personajes de la novela deban afrontar su condición de refugiados, y aunque todos sufren a su manera, me gustaría recalcar la forma en que la madre debe soportar el mayor peso, pues es ella quien se hará cargo de la vida diaria de su familia en medio de la pobreza y el rechazo.

Madurar: la jovencísima protagonista de la novela también deberá enfrentarse a la realidad del refugiado y deberá hacerse consciente de lo que significa vivir una “infancia difícil”, en pocas palabras: deberá madurar, algo que quizás se pueda ejemplificar en el momento en que ella asume la responsabilidad de “vigilar” y “curar” las pesadillas de su padre… Quien no haya leído la novela no puede perderse este momento particular de la historia.

Sentirse siempre un extranjero: y por último, como refugiados, los protagonistas estarán obligados a adaptarse a las nuevas condiciones y costumbres de cada uno de los países que utilizan para huir de la guerra y la muerte. La novela, divertida en medio de la zozobra, también parece sugerirnos la idea de que, ante la guerra, debemos sentirnos siempre unos extranjeros. En definitiva, la novela parece decirnos que no podemos sentirnos ¡tan cómodos! ante la violencia y la injusticia.


Kerr, Judith.
Cuando Hitler robó el conejo rosa (1972 [2015]).
Colombia: Loqueleo, 333 p. Traducción: María Luisa Balsero. 

miércoles, 15 de marzo de 2023

Apuntes sobre "El miedo" (1882) de Guy de Maupassant.

 Ayer dimos inicio al curso “Literatura y terror”, del Programa de Desarrollo Docente, de la Universidad de Antioquia. He sido profesor durante las últimas dos décadas y aún me sigo sintiendo intranquilo horas antes de los encuentros. Ayer no fue la excepción; por suerte, se trató de un encuentro presencial y de un curso cuya temática propuse.


Llegué temprano, con el deseo oculto de que los asistentes también lo hicieran. Preparé todo lo necesario. Me repetí: tengo que saludar y decir quién soy yo ¡diablos, como si lo supiera! También tengo que presentar el curso, escuchar sus comentarios, dejar que expongan sus expectativas y, de inmediato, empezar a desarrollar los contenidos; en este caso: establecer la relación “literatura-miedo” y avanzar en la definición de la denominada “literatura de terror”.

Debía, en pocas palabras, estirar los minutos, estirarlos, estirarlos… porque además tenía en mente leer, a modo de ejemplo, a Guy de Maupassant: quizás el escritor de terror más conocido de Francia. Mi objetivo estaba cifrado en presentarlo de tal manera que los asistentes se recriminaran el no haberlo conocido antes: “¿Cómo es posible que uno diga que le gusta leer literatura sin conocer a Maupassant?”, algo así quería que se dijeran. Sé que exagero, pero esa era mi meta.

Como suele suceder en estos casos: el tiempo no fue suficiente. Al final, sólo alcanzamos a leer, apresuradamente, un cuento, y nada más. No importa, me digo, pero sé que sí importa, y por eso dejo aquí algunos comentarios sobre el autor y su obra.

Espero que los interesados puedan robarle tiempo a sus ocupaciones para dedicarlo a la lectura, y también espero que quieran asistir a nuestro próximo encuentro: nos ocuparemos de la dupla: ¡Guy de Maupassant y Edgar Allan Poe!

De colecciones y ediciones

No conozco todas las colecciones de cuentos de Maupassant; sin embargo, me gusta pensar que la mayoría de ellas están provistas de obras imprescindibles. De nuevo voy a exagerar: ¡es que con Maupassant no hay pierde! Incluso, cuando uno de sus cuentos no resulta de mi total agrado suelo pensar: el problema es mío, de seguro que me entretuve y me perdí de algo, ¡maldición!, qué pena con el autor.

Sé que, en español, la editorial Páginas de Espuma tiene una edición, en dos tomos, de los cuentos completos del autor. Asimismo, la editorial Valdemar publicó un centenar de ellos en un solo tomo. Ambas ediciones cuentan con la traducción del especialista Mauro Armiño. Sin embargo, repito: cualquier colección está bien. En mi caso, por ejemplo, comentaré la colección de la editorial Eneida.

Creo que no sobra decir que, por lo regular, las editoriales han organizado los cuentos del autor bajo temáticas aleatorias: horror, muerte, locura, crueldad, el tema del doble, etc. Membretes que poco o nada le importaron al autor, pues nunca compiló sus cuentos de esa manera. Se sabe que publicaba en formato libro cada vez que sus publicaciones, en los diarios y las revistas, alcanzaban un número considerable de páginas.

El miedo

La editorial Eneida compiló en su edición quince cuentos. Materialmente es un libro bien armado, con guardas de color rojo intenso, así como solapas informativas. Además, la portada está coronada por la enigmática ilustración: Retrato de Dagny Juel Przybyszewska, de Konrad Krzyzànowski. Desconozco el tipo de papel utilizado en la portada de este libro (que es el mismo de toda la colección “Confabulaciones”, a la que pertenece), pero tengo que decir que, incluso, su contacto físico es especial…

El título de la antología responde a uno de los cuentos del autor, publicado en 1883. Considero indiciario que el libro se abra con este cuento porque, desde mi punto de vista, es el miedo el que permite reunir al “terror” y al “horror”, es decir: a las dos clasificaciones que más suelen utilizar, diferenciadamente, los estudiosos. Asimismo, porque en el cuento su protagonista no duda en clamar lo siguiente:

¡Permítame que me explique! El miedo [...] es algo espantoso, una sensación atroz, como una descomposición del alma, un espasmo horroroso del pensamiento y del corazón, cuyo mero recuerdo provoca estremecimientos de angustia (10).

Lovecraft dirá, en el siglo XX, que el miedo a lo desconocido es la emoción más antigua y poderosa de la humanidad, tan antigua como el pensamiento y el habla humana, y de allí que su aparición en el arte deba ser percibida como algo natural.

Asimismo, es importante comprender que lo importante, en esta literatura, es la intención de crear una “atmósfera” que produzca miedo. Repito: la intención, ya que el hecho de que lo logre, o no, escapa a los estudios literarios y depende de cada uno de los lectores.

Además del cuento “El miedo”, la antología contiene los cuentos: “Las sepulcrales”, “Suicidas”, “El lobo”, “Junto a un muerto”, “Magnetismo”, “La aparición”, “Carta que se encontró a un ahogado”, “Sobre el agua”, “¡Quién sabe!”, “¿Fue un sueño?”, “Carta de un loco”, “La mano disecada”, “La noche” y “La mano”.

Creo que podría generalizar (equivocadamente) y decir que la gran mayoría de los cuentos reunidos en esta antología hacen uso del relato enmarcado, es decir, la estrategia que lleva al narrador a ceder su voz para que otro personaje cuente lo que vivió. Véase, por ejemplo, el caso de “La aparición”: “En un momento dado, el marqués de la Tour-Samuel [...], dijo, con voz un tanto temblorosa: [...]” (65), y justo después de los dos puntos (:) escuchamos a este personaje narrar la historia. Ni siquiera cuando finaliza volvemos al relato base, pues el cuento se acaba, y punto final.

No sobra decir que este recurso fue propio de muchos otros autores de la época y que, incluso, hace parte de la tradición de esta literatura; recuérdese, a modo de ejemplo, el caso paradigmático de Frankenstein (1818), de Mary Shelley. Quizás en los encuentros presenciales podamos abordar los aportes que ofrece el relato enmarcado en la creación de la “atmósfera” y su intención de generar miedo.

Otra característica de estos cuentos es la lucha evidente entre el mundo de las ideas y la razón, versus el mundo de los sentimientos, entre ellos, el más importante: el amor (lo que conocemos, a grandes rasgos, como “Romanticismo”). Sus personajes se debaten entre los raciocinios, a veces insuficientes, y los sentimientos que se agolpan en sus cuerpos. ¿Cómo aceptar el amor si eso significa creer en lo inexplicable? A continuación, un fragmento de “¿Fue un sueño?”:

¿Por qué se ama? ¿Por qué se ama? Qué extraño es ver un solo ser en el mundo, tener un solo pensamiento en el cerebro, un solo deseo en el corazón y un solo nombre en los labios…, un nombre que asciende continuamente, como el agua de un manantial, desde las profundidades del alma hasta los labios, un nombre que se repite una y otra vez, que se susurra incesantemente, en todas partes, como una plegaria (113).

Sé que estos apuntes están quedando muy largos, y por eso nombraré –para ir cerrando– , que en nuestras próximas lecturas deberemos abordar la manera en que el autor logra crear la “atmósfera” inquietante e inexplicable de sus relatos, pero más importante, espero que podamos reflexionar sobre qué sentido tiene, en nuestras vidas, enfrentarnos a estas lecturas. Creo que la lectura literaria nos entretiene, ¡por supuesto!, pero también logra algo más en nosotros. Quizás por eso estamos aquí, leyendo sobre hombres atormentados, en lugar de estar haciendo algo… no sé... ¿útil?

Unas pocas palabras sobre el autor

Guy de Maupassant fue admirado por autores como Chéjov, Tolstoi y Lovecraft. Vivió una vida parecida a los argumentos de sus cuentos fantásticos: sufrió de problemas visuales, alucinaciones y manías persecutorias. Fue adicto a la cocaína. Intentó suicidarse en repetidas ocasiones. Al final, fue internado en un sanatorio.

Se sabe que no logró entenderse con su padre, Gustave de Maupassant, pero fue amigo y admirador de otro Gustave: Flaubert, a quien consideró como su verdadero padre. También admiraba a Schopenhauer. Su primer cuento apareció en una publicación que preparó Emile Zolá. No le gustaban las cofradías y los grupos, y por eso rehuyó de la escuela naturalista. Además de seis novelas, publicó más de trescientos cuentos; así como algunas obras de teatro, ensayos y artículos periodísticos.

Conoció la obra de E. T. A Hoffmann y Edgar Allan Poe. Lo que hizo con ellas está por encima de lo que ya habían logrado el resto de los autores franceses, a saber: Nodier, Gautier, Merimée, etc.

En Maupassant, lo inexplicable se origina en lo cotidiano, en lo externo. Como alumno de Flaubert expuso la realidad, pero buscó descubrir en ella lo oculto, lo profundo… Por lo regular, aquel descubrimiento detona una crisis en el interior del protagonista. Algunos de sus lectores, dicen, haberse sentido igual.

Estos apuntes aparecieron por primera vez en el blog guardopalabras: Enlace.


Maupassant, Guy de.
El miedo (1882 [2012]).
Madrid: Eneida, 158 p.
Traducción: Víctor Balaguer.


Asimismo, invitamos a los interesados a este curso, dedicado a la "Literatura de terror", próximo a abrirse: